Un procurador judicial en Santander ha de estar siempre informado sobre las novedades judiciales, además de tener la formación requerida.
¿Sabías que ya en la Antigua Roma existía el oficio de procurador? En este post sobre la figura del procurador judicial en Santander, vamos a hablarte sobre algo que afecta tanto a nuestro trabajo como a tu posibilidad de acceder a la Justicia: los cambios producidos estos años en cuanto a tasas judiciales.
Seguramente, hayas oído hablar de las tasas judiciales (o el "tasazo") que impuso el entonces ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón. O quizás incluso te haya afectado directamente. Mientras estas tasas estuvieron vigentes, tanto las personas físicas como las jurídicas debían pagar una tasa para poder entrar en cualquier asunto judicial. Tal cosa tenía una intencionalidad disuasoria, es decir, se buscaba dificultar a las personas y empresas con pocos recursos su acceso a la Justicia.
Siempre hubo dudas sobre la constitucionalidad de una medida así, pues limitada un derecho esencial como es el de la tutela judicial efectiva. Y en julio de 2016, el Tribunal Constitucional declaró las normas que regulan las tales tasas judiciales como contrarias a la Constitución. Recuerda, por cierto, que ya en el año anterior (2015) se realizó un cambio para que al menos las personas quedaran finalmente exentas de pagar estas tasas.
Pero vayamos a lo concreto: ¿puedes exigir la devolución de las tasas anuladas que has tenido que pagar en los años previos? Pues el Constitucional ha establecido que no. Por tanto, la nulidad solo debe aplicarse a partir del 2016.
En el despacho de Federico Arguiñarena Martínez sabemos y defendemos que el procurador o procuradora desempeña labores imprescindibles para un proceso judicial. Nuestra mayor preocupación se centra en asesorar de la mejor manera a todos nuestros clientes, cumpliendo en todo momento con las funciones que hemos de desempeñar en los juzgados y entre estos y los interesados.